Este cordobés nacido en la calle Alfaros en 1959 se hubiese sentido cómodo en el renacimiento. Eso explicaría la multitud de proyectos, estudios y aventuras vitales en las que se ha embarcado desde siempre, pero con dos líneas comunes a toda su trayectoria: la pasión con la que se entrega a lo que hace y los valores genuinos del deporte como filosofía de vida.

Comenzó a trabajar con 15 años y tan solo un tumor puso fin anticipado a su carrera profesional en 2021 cuando ejercía de Jefe de Producto nacional en Endesa Energía, última faceta técnica, tras una larga trayectoria en la multinacional de este especialista en mercados eléctricos que en américa catalogarían como un “self made man”.

En el intervalo y para no dejarse mucho tiempo libre fue, entre otras cosas: socorrista acuático, miembro de la Liga de Sociedades de la Cruz Roja Internacional, jugador de baloncesto, ajedrez, tenis de mesa y fútbol, ciclista, director de Cruz Roja de la Juventud en Córdoba y en Andalucía, miembro del Consejo de la Juventud de España, vicepresidente de la Federación Española de Salvamento, pionero del triatlón en España, cofundador de la Federación Española de Triatlón, y primer presidente de la federación andaluza de esa novísima especialidad, juez nacional, alma impulsora y director durante 14 años del Califas de Hierro en Posadas, amante de las motos y motores, promotor del movimiento bicicletas blancas en recuerdo de los ciclistas atropellados en carretera. Además, cinéfilo, lector todo terreno, y curioso aprendiz de casi todo, que sigue intentando formarse cada día.

Fiel a su pensamiento de devolver a la sociedad parte de lo que nos da, estuvo ejerciendo responsabilidades públicas en la Junta de Andalucía y en el Ayuntamiento de Córdoba. Enamorado de su ciudad y de la historia en general, al apartarse de la vorágine laboral recuperamos a un implicado ciudadano que se integró en la Asociación Córdoba 2030 en busca de lanzar nuevas ideas para mejorar Córdoba. Y también rescatamos a un estudioso del deporte local que durante los dos últimos años ha dedicado buena parte de su recién estrenado ¿tiempo libre? a explorar los fondos bibliotecarios y periodísticos y recuperar así para este libro un trozo de la historia deportiva y social local, en la que rinde un homenaje a todos los pioneros de la bicicleta que dieron forma a este deporte en Córdoba y provincia desde el inicio de los velocípedos en 1894 hasta 1972, año en el que ha decidido parar porque el libro se convertía en enciclopedia.

Si eres uno de los afortunados en poseer este libro tienes ante ti una lectura que seguro te apasionará porque el autor ha derrochado esa emoción impregnando cada uno de los capítulos de este libro y podrás decir a su finalización que tienes un master de experto local en este duro deporte del ciclismo y de la intrahistoria de la ciudad, esa que muchas veces no se recuerda en los libros oficiales pero que aflora en cada costura y en cada página de las que se compone este libro.